Conviene especializarse en un solo deporte o divertirte practicando varios
Desde pequeño jugaba al fútbol en otoño, al básquetbol en invierno, al lacrosse en primavera y al béisbol en verano. Creo que me gustaba practicar varios deportes cada unos pocos meses. Además, ayudaba que era bastante bueno en todos ellos. Pero el año pasado, un entrenador de básquetbol me dijo que realmente tenía potencial para obtener una beca universitaria. Entonces, dejé todos los otros deportes y ahora soy uno de los mejores jugadores de mi preparatoria. Ese estatus fue genial por un tiempo, pero ya no me llena. Extraño jugar y entrenar otros deportes con diferentes compañeros y entrenadores cada temporada. Para ser sincero, ni siquiera sé si me sigue importando la beca. Creo que solo quiero que los deportes sean divertidos, como solían serlo. ¿Qué harías si fueras yo?
Entrenador Gjert Ingebrigtsen: No puedo decirte si deberías dedicarte por completo a un solo deporte. Nadie puede tomar esa decisión por ti. Lo que sí puedo hacer es darte una serie de preguntas nuevas que debes hacerte a ti mismo. Si las respondes con honestidad, puede ser que encuentres tu propio camino, que es el único correcto.
Comienza por lo fundamental: "¿Por qué practico deportes?". Si es por las amistades, la diversión y la emoción de aprender algo nuevo constantemente (todas razones muy válidas), no tiene sentido pensar en la especialización. Sal a jugar cualquier deporte que te haga feliz y no te preocupes en seguir leyendo.
Sin embargo, si quieres convertirte en un atleta universitario o profesional, o si tienes esa sensación especial que solo se calma al competir y ganar a alto nivel, entonces en algún punto deberás elegir un deporte, incluso pueden ser dos, pero uno es mejor. Cuando divides el esfuerzo, es más difícil ser el mejor en cualquier deporte.
A continuación, pregúntate: "¿Estoy listo para elegir?". Y sé muy honesto, porque tú serás quien vivirá con esa decisión. Algunos atletas saben lo que quieren hacer desde el principio. Otros no lo descubren hasta la universidad. He visto ambas situaciones de primera mano en mis tres hijos, todos corredores de élite a quienes entreno.
Mi hijo mayor, Henrik, era esquiador a campo traviesa, el único problema era que vivíamos en el lugar equivocado de Noruega, donde no había suficiente nieve. Filip, el del medio, era un jugador de fútbol muy dotado que simplemente, con el tiempo, se inclinó por el running. Ambos adquirieron muchas habilidades y sabiduría por esa diversificación temprana. Pero también ganaron muchísima concentración cuando, en algún momento, decidieron dedicarse en exclusiva al running.
Y luego está Jakob, el menor, que cuando tenía unos 11 años, me dijo: "Quiero ser el mejor corredor del mundo". ¡En su mente, él ya estaba decidido! Y desde ese día jamás titubeó.
Quiero que sepas que cada uno de mis hijos tomó su propia decisión sobre qué deporte elegirían, o incluso si querían practicar alguno o no hacerlo en absoluto. (Conozco muchos casos, y me siento igual de orgulloso de los que nunca quisieron competir). No me interpuse en el camino de Henrik y Filip cuando quisieron esquiar o jugar fútbol. Y no le dije a Jakob que tenía que hacerlo todo para convertirse en un "atleta completo".
Es lamentable, pero esta es una elección que muchos, muchos chicos nunca pueden tomar. Solo hacen lo que sus padres les dicen que hagan en cuanto pueden tomar un balón o correr en línea.
Como no mencionaste a tus padres, asumo que tienes su apoyo sin importar lo que elijas. Pero sí parece que tomaste las palabras de tu entrenador de básquetbol como sagradas. Durante un partido o una práctica, eso es exactamente lo que debes hacer. Sin embargo, cuando se trata de decisiones de vida, debes preguntarte: "¿Estoy haciendo lo que quiero hacer o lo que mi entrenador piensa que debo hacer?".
Ahora bien, es posible que estés dándole vueltas al tema de la beca. Es posible que pienses que el reloj sigue avanzando. Creo que es completamente justo dejar que eso influya en tu decisión. Debo decir que para Henrik, recibir una beca por atletismo fue un gran factor que influyó en su decisión para optar por el camino del running. Debes sopesar los pros y contras de elegir este medio en particular para obtener esa meta específica.
Una manera de hacerlo es preguntarte: "¿Amo este deporte lo suficiente como para sentirme aburrido la mayor parte del tiempo?". Porque el entrenamiento diario, la práctica, la recuperación de lesiones, no son cosas que podamos describir como divertidas.
Hace muchos años les dije a mis hijos: "Esto no es por diversión, esto se trata de resultados". Es casi como una paradoja, porque esos resultados (ganar al más alto nivel) son una de las mayores alegrías que se puedan sentir. El único motivo por el que mis hijos pueden pasar por todo ese trabajo es porque saben que lleva a una gran alegría. Aman tanto la competencia que, hasta cierto punto, aprendieron a disfrutar del entrenamiento. No puedes esperar diversión constante, porque los deportes profesionales no son así.
El deporte puede ser insoportablemente aburrido e increíblemente emocionante. Puede ser absolutamente confuso y puede brindarte momentos de perfecta claridad. Puede estar lleno de soledad deprimente y de conexión reconfortante.
Todo lo que acabo de mencionar también aplica a la vida. Entonces, una última pregunta: ¿Quieres vivir las subidas y bajadas de la vida en una cancha de básquetbol? ¿En una cancha de lacrosse? ¿En una oficina? ¿En un escenario o en un estudio? Como dije al principio, no puedo darte la respuesta, solo puedo ayudarte con las preguntas que te debes hacer. Estas preguntas podrán ayudarte a sentir que tienes más información, mayor control y que estás más consciente de ti mismo para tomar la decisión. Pero al final del día, la elección es tuya.
Entrenador Ingebrigtsen
Gjert Ingebrigtsen es un entrenador de atletismo noruego que entrena a sus hijos, Henrik, Filip y Jakob, quienes están a un nivel de élite. Los hermanos dominan las carreras de media distancia en Europa: los tres obtuvieron medalla de oro en 1500 metros en los campeonatos europeos. Jakob también ganó la medalla de oro en 1500 metros en los Juegos Olímpicos de 2020, tiene la medalla de oro europea en los 5000 metros y es el corredor más joven en correr una milla (1,6 kilómetros) en menos de 4 minutos. Sin haber tenido antecedentes en running, Gjert desarrolló su propia filosofía de entrenamiento basada en el proceso riguroso y la verificación constante de resultados. En 2018, lo nombraron entrenador noruego del año.